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A vueltas con las rotondas de Martos, de Javier Romero Dartois

Nota de Redacción: El lector de Martos al Día, Javier Romero, hace una reflexión en voz alta sobre las rotondas de nuestro pueblo. Con este artículo completamos el publicado hace unos días respecto a la legalidad de los badenes.

A vueltas con las rotondas de Martos,
de Javier Romero Dartois

Todo conductor que haya tenido la oportunidad de conducir en una travesía urbana donde unas luces de color verde, ámbar y rojo eran las dueñas de decirnos si podíamos pasar, prestar atención al inminente cambio de color o tener que detenerse, nunca habríamos pensado que las íbamos a echar de menos.

El sentido de echar de menos es porque sabíamos que o bien teníamos la prioridad de continuar con nuestra dirección o por el contrario tener que detenernos para ceder el paso a otros vehículos o peatones, pero desde hace tiempo esas luces han desaparecido de todo cruce, intersección, etc. que existe en Martos para ser sustituido por una especie de scaletrix en miniatura, que la verdad sea dicha, es una odisea el acercarte a ella porque casi nunca sabes si podrás pasar con más o menos tranquilidad o tendrás que frenar en seco, claro está que si no hay tráfico puedes considerarte el propietario de la rotonda. Nunca sabes si de repente te aparecerá un vehículo a toda velocidad porque piensa que tiene prioridad, si al estar pendiente de ello tienes en cada salida un paso de peatones en el que tienes que poner los cinco sentidos porque muchos de ellos, aún al estar detenidos esperando que les cedas el paso te dicen que sigas, o porque son unos verdaderos camicaces y se lanzan de una manera casi heroica para cruzar desafiándote para demostrarte que ellos tienen la prioridad, aunque de antemano tú sabes perfectamente que es así. ¿Cuántos conductores sabrían decir el uso de los intermitentes que hay que poner cuando te dispones a cruzar una rotonda?

Recientemente estuve buscando por internet la respuesta, por si desde que obtuve el carnet de conducir, el código de circulación había cambiado respecto a mi pregunta, pero la verdad es que no ha cambiado. No obstante tenemos conductores que ponen el intermitente a la derecha para advertir que van a salir en la próxima salida (esto sería lo correcto), pero tenemos otros conductores que utilizan el intermitente para advertir que van a hacer la rotonda pero no para advertir de cuándo la van a abandonar, otros conductores para avisarte de todo (tanto para hacer la rotonda como para la primera salida, los cuales son los perfeccionistas) y otros que ni uno ni otro, van a su aire.

Cruz del LloroEl ejemplo más significativo es la mini rotonda de la Cruz del Lloro, la cual no es más grande que una piscina prefabricada, y que tiene 5 salidas y se accede desde 4 entradas, quiere esto decir que hasta nueve coches podrían coincidir al mismo tiempo, pero donde con 3 coches ya estaría saturada. Por lo tanto ventaja o inconveniente, cómo afecta al tráfico, da tiempo a señalizar algo si tienes que estar pendiente de todo el que entra y sale?

Demasiadas son las rotondas que en Martos se han creado para un flujo de vehículos que en hora medianamente punta es un verdadero caos, y para qué vamos a hablar cuando es hora punta o coincide toda la afluencia del Polígono Industrial al terminar una jornada de trabajo. Se forman colas interminables como la de la Avenida Moris Marrodán, o la que hay previa a llegar al cruce de la Fuente Nueva y Colegio S. Antonio de Padua, que antiguamente con los semáforos nunca hemos visto.

En lugar de mejorar el tráfico lo que han hecho es retener y ralentizar el tráfico y que circulemos con miedo cuando tenemos que ir de una zona de Martos a otra teniendo que pasar por ellas. Yo no digo que sean malas o inútiles, todo lo contrario, pero obviamente una rotonda está definida para ser fijada en lugar donde exista una intersección con una circunferencia suficientemente grande donde no reduzca el volumen de vehículos y el acceso o salida no suponga un reto constante para el conductor y sus ocupantes. Y todavía no quisiera hablar de la mini rotonda del Centro de Salud, donde necesitas dar tantos giros al volante para poder acceder al Centro que cuando has terminado de hacerla necesitas una receta del servicio de urgencias para el dolor de los brazos.  ¡ De verdad no tiene sentido !

¿ Podemos soñar con que nuestro Ayuntamiento recapacite sobre ello ?