Crónica en recuerdo de Manuel Moreno
De Redacción | 17. junio 2008 | Categoría: Clásica, Deportes | 10 comentarios ComparteTweet
Hablar o escribir en este caso de alguien que nos ha dejado, sin caer en fáciles elogios, es algo que es muy difícil de realizar. En esta situación, casi todos acabamos siendo buenos, lo cual seguramente no es cierto. Pero si podemos y debemos destacar en estos momentos los aspectos positivos, que también casi todos los tenemos. Y Manolo Moreno, presidente y uno de los fundadores del Club de Tenis Martos, no podía ser menos. Su pérdida prematura, a los 59 años, después de luchar durante más de un año por su salud, junto con su mujer Villi, sus tres hijos, crea un vacío entre los amigos del sevillano y todos los que tenían en el deporte de la raqueta su querida devoción, que podemos llenarlo con el recuerdo.
Y recordamos que Manolo, desde una entidad sin pistas propias, aprovechando lo público y acercando este deporte a todos, impulsó las Escuelas del Club; él mismo impartía las clases de las Escuelas Municipales; preparaba distintos torneos; el Nacional Femenino, en el que no paraba en pleno mes de agosto; y sobre todo, más de veinte años celebrando, el “Ciudad de Martos”, que desde el 2.000 fue puntuable para la ATP en categoría Futures dentro del calendario de la Federación Internacional. Quién podía imaginar que un puñado de gente, de un municipio de poco más de veinte mil habitantes, podía sacar adelante algo así. Todo eso lo coordinaba Manolo desde la trastienda del negocio que su gran amigo Juan tiene junto a la Iglesia de San Francisco.
Todos témenos la imagen de ver a Manolo en sus modestos dos caballos, y mas tarde BMW, siempre acompañado de su inseparable Javi – siempre entrañable para todos -, repartiendo saludas, colgando carteles, buscando apoyos económicos; y en las pistas, colocando los cuadros de luz, subido a una escalera para colocar banderolas, montando gradas… y siempre entre risas y comentarios socarrones. Su talante, su sencillez, su actitud positiva, su simpatía, le dio la fuerza para atender todo eso y también nos dio fuerza a los demás para sacar adelante el ultimo Futures sin su presencia. Había en él cualidades propias del que tiene madera de presidente: Manolo era especialmente conciliador; sabía hablar con todos para integrarlos y sacar de cada uno lo mejor; buscaba soluciones a base de dar tiempo a los problemas, y sobre todo Moreno era un buen relaciones públicas, no al uso pero si a su manera, que sabía dirigirse a los responsables de las administraciones y de las empresas, a pesar de su poca locuacidad al hablar en público. Defecto que él reconocía con toda naturalidad.
El recuerdo de Manuel Moreno será siempre inseparable del hecho de que Martos sea conocido en el tenis español y sea un referente en el tenis andaluz. Ambos, Manolo y el tenis, forman una única alusión. Así que después de la fuerza que ha dado, no queda más que decirle en este trance de su muerte, lo dicho por su madre, de 92 años, al despedirlo en el cementerio: “Manolo, mi arma, valiente”.
Tus amigos del Club de Tenis Martos
Que bien habeis descrito a Manolo, desde aqui mi apoyo a su familia y un besazo especial para ese angel de hijo que es Javi.
Como siempre dicen, «los buenos se van», yo no lo conocía personalmente, solo de vista, pero creo que la mejor forma de recordarle es cambiar el nombre del Futures «Ciudad de Martos» por el Futures «Manuel Moreno», al cual según lo descrito, hizo realidad en nuestra ciudad por su constancia y trabajo.
Simplemente lo conocia de vista, pero sin conocerlo personalmente me parecia una excelentisima persona, doy mi apoyo a su familia especialmente a Javi su hijo q si que lo conozco personalmente
Conocía a Manolo desde hace muchos años, cuando tenía tan solo 5 años ya era alumno suyo en clases de tenis y debo de reconocer que me enseñó mas de lo que se podía enseñar a un chaval de 5 años, era muy buena gente y siempre tenía una sonrisa en la cara. Un saludo a su mujer Villi y a sus tres hijos y sabed que siempre tendremos a Manolo en el recuerdo
desde que he visto el post llevo dando vueltas a que decir, y la verdad aun no lo se, cuesta trabajo «olvidar» cuando se tienen tantos recuerdos y tantas horas de trabajo juntos, y si ademas pasas horas y horas donde a el mas le gustaba estar, a parte de con sus gallinas alli detras la electrica y donde no puedo evitar mirar cada vez que paso para ver si esta el bmw, se hace dificil el trago de su ausencia.
Moreno siempre seras recordado por esos jony con agua, cutty con ligth, fanta de limon para Javi, y lo que sea que es lo que tu siempre bebias.
te hecharemos de menos aunque siempre estara presente en las pistas del poli.
Estoy de acuerdo con el comentario nº2,se tendria que cambiar el nombre al torneo,seria el mejor homenaje.Mi mas sentido pesame a la familia de Manolo y al C.de Tenis Martos su otra familia.
Manolo, además de ser una buena persona, era un buen profesor. Nos dió clase desde los 10 u 11 años y siguió con nosotros hasta que, por motivos de estudios, no podíamos continuar con las clases. Manolo nos enséñó a jugar al tenis y sobre todo a difrutarlo, nos animaba a participar cada año como voluntarios en el torneo, nos decía que éramos sus niñas. Le contábamos todo después de clase sentados en las gradas, te notaba cuando estabas triste y siempre siempre te sacaba la sonrisa. He visto compañeras llorar de rabia por haber perdido en nuestros torneillos que el organizaba y a Manolo decirnos una y otra vez que lo importante es pasarlo bien, no era nada competitivo y eso es lo que nos intentaba inculcar, saber ganar y saber perder. Hablo en nombre de todos los de mi generación que estuvimos como alumnos mucho tiempo y que conociamos a Manolo como si fuera un amigo, nuestro amigo especial.
Sentimos mucho su perdida y sobre todo, siempre estará su recuerdo entre nosotros.
Un saludo
Ahora que he leído la crónica que hace ilusión a Manuel Moreno me doy cuenta que no solo era un profesor de tenis si no un gran profesor de la vida, he trabajado con su hija y me ha enseñado mucho como persona
Es una persona que aprovecha lo que la realidad le ofrece en cada momento y se mete de lleno en ella usando su imaginación para sacar el mejor partido a cada situación.
Es una persona agradable, alegre y satisfecha, con la confianza que las cosas salen bien si pone todo su esfuerzo. Los pequeños fracasos y contratiempos los olvida rápidamente y vuelve a emprender los objetivos con el mismo ahínco de antes.
Es una persona que escucha las opiniones contrarias con respeto, sin admitir críticas internas. Comprende las equivocaciones de los otros, sin recriminar automáticamente. Sabe convivir con los defectos de los demás sin recordárselos continuamente.
Es una persona que controla los altibajos de su estado de ánimo. Identifica las ideas negativas que han inducido esas tendencias. Elimina esas ideas sustituyéndolas por otras de contenido diferente, o iniciando una actividad que sirva para tener un pensamiento positivo.
Es una persona que ante la presencia de un estímulo psicológico determinado, lleva o a cabo un análisis de la situación, para dar una respuesta que no sea injustificada, exagerada o que conduzca a comportamientos impulsivos.
Ahora me doy cuenta el por que es como es ….gracias a su padre.
Hace poco que conozco esta fabulosa página, he estado tres dias sin poder usar el ordenador(los dichosos virus) y hoy al volver a entrar y ver la perdida de Manolo el Sevillano no se lo que me ha entrado,pues yo vivo en Jaen como muchos sabeis y casi todos los jueves echamos un partidillo de futbol sala varios compañeros de Telefonica y ahi le preguntaba a Màximo Hidalgo que era buen amigo de Manolo por el y me decia que se habia recuperado bastante y ahora me llevo esta mala noticia y como decia alguien anteriormente se llevan a los buenos.
Manolo cuantos partidos te arbitrè y nunca ni una sola protesta,te echare de menos amigo.
Solo quiero dar mi apoyo a toda su familia y en especial a Javi que me recuerda muchas veces cuando estaba arbitrando y se ponia a mi lado y me comentaba un monton de cosas,ànimo Javi y un abrazo para ti y tu familia.
saludos
«Cuando alguien cercano se muere a destiempo, el dolor te obliga a tomar conciencia de la precariedad de tu propia vida» (Almudena Grandes)